Bashmar Mazadeplata

Sacerdote de Vidalzea

Bashmar es un hombre de carácter afable y aparentemente inseguro, pero de inflexible y recta moral. Su actitud predispuesta a ayudar a los demás y su evidente bondad le permiten acercarse a ellos para derrochar su palabrería en favor de la Diosa a la que rinde culto. Aún así, no son pocos los que desconfían de sus intenciones al principio por su falta de carisma y su ocasional tartamudeo, y creen que únicamente se acerca para conseguir algo de ellos. Sin embargo, al final sus recelos sucumben a su persistencia y descubren que no es así, que sirve al sacerdocio de la Diosa de la Vida por pura devoción y amor a los demás. Es un espíritu tierno y altruista dentro de un cuerpo grandullón y patoso.

Siempre luce con orgullo el símbolo de Vidalzea, que lleva en el pecho como un emblema que representa todo aquello en lo que cree fervientemente y que muestra a todo aquél a quien se presenta. Es una cruz compuesta por un pequeño martillo y un delicado cincel, exquisitamente trabajados sobre un círculo de metal rosado. El medallón descansa sobre su túnica blanca siempre impoluta, pues limpia con desesperante pulcritud todos los elementos de su atuendo a diario. Su escudo y su maza recubierta de plata siempre le acompañan, a pesar de que en escasas ocasiones se le puede ver utilizándolos, ya que sólo bajo situaciones realmente extremas usa la violencia.

BashmarCuando le preguntan sobre su pasado, Bashmar habla con cariño sobre sus queridos padres, unos humildes y honestos campesinos que no tenían el dinero suficiente para criarle, por lo que decidieron ceder su custodia a la iglesia de la Diosa de la Creación. Allí, el padre Beneth se encargó de criarle y educarle como si fuera su propio hijo, aunque el resto de compañeros de la orden no dejaron de colmarle también de atenciones como si fueran sus innumerables tíos y abuelos. Y así creció, mimado por unos y regañado por otros, siempre bajo la atenta mirada del padre Beneth, que con mano recta pero afectuosa cinceló su moral hasta que se convirtió en el hombre hecho y derecho que es hoy. Su despierta inteligencia y su carácter sereno le sirvieron para ir ascendiendo dentro de la orden hasta llegar a ser prelado, habiéndose ganado por el camino el afecto de sus compañeros y de los ciudadanos que le han conocido.

Bashmar se indigna sobremanera con la maldad y el egoísmo. Sueña con un mundo en el que las enfermedades y la muerte sólo sean cosas de un pasado oscuro y olvidado. Lucha para que el bien prevalezca en todos los rincones de los reinos de Valnessia, para que la Diosa de la Creación prevalezca sobre su hermano, el Dios de la Destrucción, e invertirá cada ápice de sus fuerzas y hasta su último aliento en conseguirlo.

Frase:
"Rezo a Nuestra Misericordiosa Señora de la Creación para que nadie sufra en este mundo, para que la vida florezca como antaño y para que todos los corazones vibren en un sólo latido que haga que el bien prevalezca para siempre."


Equipo preferido:

MazaMaza de plata
EscudoEscudo de plata
Cota de mallasCota de mallas

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